Abril
5-2020
Días
8-9-10-11
Y los días
pasan. Poco a poco vamos haciendo una
rutina para los días de encierro, yo, enemiga número 1 de las rutinas, ya tengo
las mías.
En mi
familia, los hermanos nos estamos turnando para el cuidado de nuestros padres,
ancianos de 95 años cada uno, personas que en su momento nos cuidaron a
nosotros, ahora nosotros les cuidamos a ellos, con afecto, con amor, con
paciencia, en cumplimiento del mandamiento con promesa: Honrar padre y madre.
Mi madre
dice: Si a mí no me mataron las 7 plagas de Egipto, no me va a matar ningún
virus moderno. Siempre con su buen humor y sus bromas. Dios la oiga.
Nunca me
preparé para ser enfermera, es algo para lo que uno nunca se prepara y
deberíamos, porque cuidar un enfermo y más si
es anciano, es de mucha responsabilidad y resistencia. Admiro los profesionales de la salud que
ahora enfrentan la pandemia, con largas y agotadoras jornadas.
Bueno,
pero ahora me asalta una pregunta: Y después? Que pasará mañana cuando todo
regrese a la normalidad?
Una vez
superado el miedo, habremos adquirido conciencia? Tengo miedo de que todo esto que
estamos viviendo sea en vano y que no dejemos un cambio tras de nosotros.
Hemos
enfrentado esto con valor, algunos con la serenidad de que acá vinimos a morir,
pero que queremos vivir, claro que sí, porque si nos detenemos a ver la realidad,
caeremos como fulminados por un rayo más que por el mismo virus.
Pero y
después de que pase todo esto, estamos preparados o nos estamos preparando para
la enorme bomba fiscal que detonará cuando la pandemia reduzca?
Según el
experto Paul Krugman, es de esperar un descenso del PBI bastante
importante, que se irá
recuperando en cuanto se vuelva a la normalidad. Sin embargo, para salir de
este atolladero los gobiernos y bancos centrales han puesto toda la
maquinaria en funcionamiento para insuflar de liquidez a los países, a
costa de un mayor endeudamiento y un déficit mucho más elevado.
“ La crisis no es una repetición de la Gran Recesión,
dice Krugman, y agrega que habrá una segunda ola si no actuamos con la fuerza
suficiente ahora.”
El economista ganador del Premio Nobel aseguró en una
entrevista a Business Insider que es importante darse cuenta de que el paquete
fiscal por USD 2 billones aprobado
por el Congreso de los EEUU para revertir parte del daño económico ocasionado
por la propagación del coronavirus “no es un proyecto de ley de estímulo; se
trata principalmente de un proyecto de ley de socorro en casos de desastre”.
Los medios no parecen preocuparse de ello, no recibe atención
y cobertura, porque justo cuando la economía empiece a recuperarse, seguramente
habrá despidos masivos de empleados y recortes a auxilios de desempleo.
Krugman manifestó que “el coronavirus ha sido como el
calentamiento global, pero a una velocidad cien veces mayor” y opinó que
es consecuencia de “todo el conjunto de actitudes derivadas de la negación climática”.
Y acotó: “Incluso ahora, no estamos haciendo lo que siempre
se hace cuando tienes una emergencia, que es federalizar la producción de
equipos esenciales. Aún no lo hemos hecho”.
“La crisis se prolongará incluso una vez que la pandemia
disminuya, porque los gobiernos estatales y locales que se encontrarán frente a
desesperantes limitaciones financieras.”
Queremos que el PBI disminuya. Queremos que muchas personas
se queden en casa y no trabajen mientras tenemos esto bajo control. El objetivo
no es tanto sostener la economía per se, sino dar tiempo para que esto
funcione y aliviar las dificultades. Esto es principalmente un proyecto de
ley de ayuda por desastre”, evaluó.
“Las cosas que son realmente importantes son los beneficios
de desempleo, dinero en efectivo para las familias, préstamos para pequeñas
empresas que permiten a las personas más afectadas superar esto con el mínimo
de dificultades financieras. También proporciona algún estímulo. Hay partes de
la economía que todavía están vivas. No queremos que colapsen porque nadie
tiene dinero para gastar”, añadió el economista a Business Insider.
“La respuesta es pedir prestado el dinero. El sector
privado no está invirtiendo. Las solicitudes de hipoteca se han derrumbado.
Negocios, ¿quién va a construir parques de oficinas y todo eso en medio de una
plaga? El ahorro privado seguramente se ha incrementado. Quizás las personas
están gastando en otras cosas parte del dinero que no están gastando en restaurantes,
pero gran parte se está ahorrando. Tenemos este enorme superávit en el
sector privado, todo este exceso de dinero que está buscando un lugar a donde
ir. Se lo ofrecen al gobierno de forma gratuita: las tasas de interés
reales son negativas. Entonces, pídalo prestado”, describió.
Por eso, el economista galardonado con el Nobel prevé que
“justo cuando la pandemia comience a desvanecerse, es de esperar ver a
los gobiernos estatales y locales recortando severamente. Además los
subsidios por desempleo son solo para los próximos cuatro meses. Gran parte del
apoyo financiero que vamos a proporcionar ahora desaparecerá justo cuando
esperamos que la economía se recuperará”. Realmente me preocupa que las
consecuencias económicas puedan durar mucho más de lo que la gente piensa.
Krugman advirtió que “una gran mayoría de las acciones son
propiedad de una pequeña fracción de la población, pero esas personas
representan una parte desproporcionada del total de gasto del consumidor. Ahora
se sienten más pobres, así que esa es otra razón por la que veremos algunas
dificultades económicas en el futuro. Las personas que se sentían ricas
y se iban de vacaciones y consumían comidas caras en restaurantes pueden no
estar dispuestas a hacerlo, incluso una vez que los restaurantes vuelvan a
abrir y una vez que las aerolíneas vuelvan a funcionar”.
En resumen, después de la pandemia los ricos serán menos ricos y los pobres serán más pobres.
No es muy alentador el panorama, pero para los que sabemos luchar y
empezar de cero, tendremos muchas oportunidades.
He leido tu articulo varias veces y lo encuentro realista, descriptivo, minucioso diría, pero algo pesimista. En la historia de las civilizaciones la humanidad ha pasado por procesos destructivos de distinta naturaleza y algunos devastadores. La misma historia muestra como la humanidad pudo resurgir luego de epidemias, pandemias y guerras con millones de muertos, holocaustos y derrumbes económicos.
ResponderEliminarEs verdad lo que dices, pero si bien un economista esta cerca de la verdad, te dire que en las historia pocos o casi ningún economista pudo acertar con el futuro economico de paises o regiones enteras, tengo un ensayo sobre eso.
Probablemente porque soy optimista, a tu buen análisis le agrego una opinión: Mientra mas profunda la caída, mas veloz el ascenso; la mayor oscuridad de la noche es justamente la proximidad el alba; creo que vamos a salir airosos otra vez, aunque si, esta vez probablemente seremos distintos.
Esperemos que así sea Raul, por éstos días necesitamos de mucho optimismo y de buenas noticias. Gracias,tu punto de vista es esperanzador.
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